Inundaciones: Lo que tu seguro de comercio no cubre
¡Hola! Soy tu corredor de seguros de confianza y hoy vamos a hablar de un tema que, aunque no nos guste, es crucial: las inundaciones. Especialmente en España, con fenómenos meteorológicos cada vez más impredecibles, es fundamental saber qué esperar de nuestro seguro de comercio. No se trata de alarmar, sino de informar y equiparte con el conocimiento necesario para que tu negocio esté lo más protegido posible. A veces, la letra pequeña esconde detalles importantes, y en este artículo te voy a desvelar lo que tu seguro de comercio no cubre en escenarios de agua.
La mayoría de los seguros de comercio ofrecen una cobertura básica para los daños por agua, lo cual es excelente. Sin embargo, hay situaciones muy específicas de inundación que quedan fuera de esta protección y que a menudo generan confusión y frustración. Queremos evitarte sorpresas desagradables. Imagina que tu negocio, con tanto esfuerzo y dedicación, sufre las consecuencias de un aguacero torrencial. La primera reacción es llamar a tu seguro, ¿verdad? Pues bien, es vital entender que no todas las fuentes de agua ni todas las circunstancias de inundación están incluidas en la póliza estándar. ¡Vamos a ello!
¿Cuándo el agua no es «extraordinaria» para tu seguro de comercio?
La clave aquí está en la distinción entre «riesgos ordinarios» y «riesgos extraordinarios». Los daños causados por fenómenos naturales de carácter extraordinario (como inundaciones por desbordamiento de ríos, maremotos o embates de mar) suelen ser cubiertos por el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) en España. El CCS es un organismo público que actúa como asegurador en situaciones catastróficas que las aseguradoras privadas no cubren.
Pero, ¿qué pasa cuando la inundación no es «extraordinaria» en el sentido del CCS? Aquí es donde entra en juego lo que tu seguro de comercio no cubre. Estamos hablando de daños por desbordamientos o desviaciones del curso normal de aguas procedentes de:
- Lagos sin salida natural ni artificial: Si tu negocio está cerca de uno y el nivel del agua sube.
- Canales, acequias u otros cursos en superficie construidos por el hombre: Si estas infraestructuras se desbordan o se averían.
- Alcantarillado, colectores y cauces artificiales subterráneos: Si estos sistemas se desbordan, revientan, rompen o averían, siempre y cuando el origen no sea un fenómeno extraordinario cubierto por el Consorcio.
Es decir, si la inundación proviene de un fallo en la infraestructura hidráulica local (una acequia que se desborda, un alcantarillado que revienta por exceso de lluvia «normal») y no por una catástrofe natural declarada como tal por el Consorcio, es muy probable que tu seguro de comercio ordinario sea el que deba responder. Pero, ¡ojo!, porque incluso dentro de este escenario, existen exclusiones importantes que debes conocer.
Exclusiones específicas: lo que tu seguro NO pagará
Aquí viene la parte más importante para entender lo que tu seguro de comercio no cubre con respecto a las inundaciones que no son consideradas extraordinarias:
- Daños por desbordamiento o rotura de presas, embalses o diques de contención: Aunque parezca contradictorio, si una presa o un dique fallan y causan una inundación, este tipo de daños no suelen estar cubiertos por tu póliza de comercio estándar. Se consideran riesgos de una magnitud específica que requieren un tipo de cobertura diferente o están fuera del alcance de la póliza general.
- Daños ocasionados por aguas subterráneas no canalizadas: Si el agua sube del subsuelo a través de fisuras, grietas o directamente por la presión freática, y no proviene de una tubería o canalización específica que se ha roto, tu seguro no lo cubrirá. Piensa en el agua que emerge del terreno sin un conducto definido; esto es un riesgo geológico que rara vez se incluye en una póliza de comercio básica.
- Daños a mercancías situadas a baja altura: Esta es una exclusión muy común y a menudo pasada por alto. Si tus mercancías susceptibles de almacenarse sobre palés, estanterías o similares están situadas a una altura inferior a 10 cm del suelo y sufren daños por inundación, el seguro no se hará cargo. La lógica es que se considera una medida de prevención básica tener los bienes elevados para evitar este tipo de siniestros menores. La única excepción sería si se demuestra que los daños se habrían producido igualmente aunque las mercancías hubieran estado por encima de esa altura (por ejemplo, si el agua superó el metro de altura).
¿Qué puedes hacer al respecto? ¡Consejos aplicables ya!
Ahora que conoces lo que tu seguro de comercio no cubre en estos escenarios, es el momento de tomar acción. No todo está perdido; hay formas de protegerte:
- Revisa tu póliza al detalle: Lo primero y más importante. Saca tu póliza de seguro de comercio y léela con atención. Presta especial atención a la sección de «exclusiones» y «coberturas por daños por agua». Si tienes dudas, no dudes en contactar con tu corredor de seguros (¡como yo!). Estamos para ayudarte a entender cada punto.
- Evalúa riesgos de tu ubicación: Conoce tu entorno. ¿Está tu negocio en una zona de riesgo de inundaciones fluviales? ¿Hay infraestructuras de agua cercanas (canales, acequias, sistemas de alcantarillado) que puedan causar problemas? Saber esto te ayudará a anticiparte.
- Medidas de prevención activas:
- Eleva tus mercancías: Es el consejo más sencillo y efectivo. Utiliza palés, estanterías robustas o tarimas para que tus productos y materiales sensibles estén a más de 10 cm del suelo. ¡Esto te puede ahorrar un disgusto enorme!
- Sellado de accesos: Considera la instalación de barreras anti-inundación para puertas y accesos si tu negocio está en una zona de riesgo.
- Mantenimiento de desagües y alcantarillado: Asegúrate de que los desagües de tu propiedad estén limpios y en buen estado. Un buen mantenimiento puede prevenir que pequeños problemas se conviertan en grandes inundaciones internas.
- Planes de emergencia: Ten un plan sobre cómo actuar si se pronostican lluvias intensas o hay riesgo de inundación. Saber qué mover, dónde y cómo, puede minimizar los daños.
- Explora coberturas adicionales: Habla con tu corredor de seguros sobre la posibilidad de ampliar tu póliza. Algunas aseguradoras ofrecen extensiones de cobertura para riesgos específicos, como daños por aguas subterráneas no canalizadas o por rotura de presas, aunque suelen tener un coste adicional. Es una inversión que puede valer la pena.
Comprender las exclusiones de tu póliza de seguro de comercio no es un lujo, es una necesidad. Nos permite ser proactivos y tomar las riendas de la protección de nuestro negocio. La información es poder, y con ella, puedes tomar decisiones inteligentes para blindar tu patrimonio contra los imprevistos.
Enlaces relacionados:
- Consorcio de Compensación de Seguros: https://www.consorseguros.es/
Llamada a la acción:
No dejes la seguridad de tu negocio al azar. Si te ha quedado alguna duda o quieres revisar tu póliza de seguro de comercio para asegurarte de que estás completamente protegido ante cualquier eventualidad, no dudes en contactarme. Como tu corredor de seguros, estoy aquí para ofrecerte un asesoramiento personalizado y ayudarte a encontrar las soluciones que mejor se adapten a las necesidades de tu empresa. ¡Hablemos y aseguremos tu tranquilidad!



